Sunday, November 23, 2008

SILENCIO

El otro dia pensaba en la madurez
de los cuarenta años,
de cómo se meditan más las cosas
se deja de actuar por impulso.
Me corrijo.
Cualquier cosa que hagamos
a los cuarenta años
es meditada,
incluso aquellas
que hacemos por impulso.
El otro día ví pasar a un pedacito de sol.
Me fui a mi cueva y tuve un primer impulso
que siguió siendo el mismo después de meditarlo.
Le hice llegar una carta y llevo horas contemplando
los efectos secundarios de hacer cosas osadas,
solo recibo SILENCIO.
Creo tener en mi mente, la información suficiente
para intuír que este SOL es una persona abierta,
que no le importa que alguien le confiese sin tapujos
que ha perdido la cabeza, que lo tome de la mano y
lo invite a ir mas allá.
Emocionalmente hablando soy bastante generosa,
puedo mostrar mis heridas, desnudarme si lo inspiras,
regalarte mis secretos, mis más íntimos secretos,
por eso te he relagalado lo primero que he pensado.
Si cometí un descalabro,
si esto es una impostura, pagaré las consecuencias.
Me quedaré sin cruzar tus recovecos, sin conocer
tus secretos,
sin recoger tus pedazos,
me quedaré con el SILENCIO,
lo peor en estos casos.
Ud. quedará señor mío, sin conocer mis perfiles,
sin conocer el milagro,
pues yo te hubiera encendido velas en la madrugada,
hubiera tocado campanas,
hubiera hecho una fiesta, señor mío, de la nada.
Pero entiendo,
si hay razones poderosas yo respeto tu silencio,
he perdido la cabeza pero la voy a encontrar.
No te dejaré de amar ni te pediré disculpas,
no tengo ninguna opción más que seguir mi camino,
más que seguir con mi vida
asi con tu SILENCIO, así, sin despedida.

Tuesday, November 18, 2008

Sinergia

Cuando estoy deprimida soy como todo el mundo, me regodeo en la tristeza, me envuelvo en mis sábanas color salmón y en mis almohadas de pluma, y resucito el descalabro. El otro dia sentí un espiritu autoflagelante y sali a mi patio de madrugada a llorar a la luz de la luna, teminé con un catarro que todavía me tortura. No puedo echarme a morir, pero qué hago para no morir? Trato de hacer un ejercicio de fe, un pacto de emergencia, trato de verme mañana, cuando todo haya pasado, y me doy cuenta de que no hay respuestas, de que tengo mas dudas que certezas. En mi mundo de palabras me vienen a la mente frases como la de Eduardo Galeano: "...estamos condenados a morirnos de hambre, a morirnos de miedo o a morirnos de aburrimiento, si es que una bala perdida no nos abrevia la existencia". Y de ahí, de en medio de la nada, sin ninguna señal alentadora, surge una bala perdida que me habla de sinergia.

Thursday, November 13, 2008

Donde pueda latir

Me dijeron mátalo, destrúyelo, destrózalo,
tíralo, lánzalo,
quémalo, rómpelo.
Pero no puedo
No siento el piso debajo de mis pies, no siento el aire, no tengo sueños, no tengo planes, no sé si estoy aquí o en alguna otra parte.Y me pregunto qué fuerza es esa que es más fuerte que yo, que el dolor y que la rabia, que me invita a esperarte, que me engaña.
No estoy pensando bien.
Hay un sexto sentido, hay un último instinto y lo voy a seguir, voy a dejarme llevar por mi conciencia, que sufre hoy una especie de amnesia provocada, o todo lo contrario. Quizá en vez de olvidar lo que ha pasado, recuerde lo que ha pasado, y entonces me de cuenta de que en vez de abrirme nuevas puertas, necesite regresar a los lugares donde he estado, y a donde no volveré sin ti. Alguien dijo: “nunca volveré a los lugares donde fui feliz.”
Hay que aprender de las derrotas. Hay que saber aguantar los aguaceros de la vida, del dolor se aprende, definitivamente. Yo he aprendido a conocerme. Dicen que el dolor limpia de todo lo superfluo y va dejando lo esencial, pero yo hablo del dolor, de ese que te hace bajar, descender a una dimensión en la que casi no puedes respirar.
Lo que pensé que eran mis partes oscuras resulta que no son oscuras, son claras, y mis sueños convergen en el mismo lugar donde convergen mis miedos. El orgullo hay que saber dosificarlo, hay que saber reorientar las antenas y poner el alma donde más uno la sienta, y el corazón donde pueda latir.
O morir.

Thursday, November 6, 2008

Desastre

Una vez escuché de Fernando Peña que si él no fuera actor sería un asesino serial. Si tenemos en cuenta que ser actor y ser escritor son prácticamente la misma cosa, yo podria decir lo mismo.
Además de para entender lo que está pasando, yo escribo para no matar a nadie. Si la gente supiera la rabia que tengo ahora, no estaría leyendo esto, no sería yo digna de absolutamente ningún sentimiento noble de parte de nadie.


La soledad es mala consejera pero la impotencia es un veneno,
y da cáncer.
Hay que hacer algo.
Entonces, como no puedo matarte y volverte a resucitar, escribo.
porque no quiero que te mueras para siempre,
quiero apagarte, desconectarte,
para que no te vayas
para que no me dejes
para que no salgas a matar pájaros sin avisarme,
porque no quiero llamarte,
quiero matarte para saber que si no estás aquí,
no estás en ninguna parte,
porque ya estoy muy vieja para esto, porque no es justo.
Porque no quiero vivir el declive,
no quiero cometer la torpeza de quedarme
para ver los manotazos de mi decadencia agonizante.
No quiero ser una mentira piadosa, ni las flores del domingo,
ni un bulto de ropa escondido bajo siete llaves,
ni un cheque, ni un compromiso, ni una historia, ni un punto y aparte.

Yo tengo todas las de perder, tú ganaste, yo lo único digno que puedo hacer aquí es irme con mi rumba a otra parte,


....no huele a cigarro, es olor a pólvora, esto es humo de calibre 18, por eso es bueno escribir, porque acabo de matarte, acabo de hacer la crónica de este desastre.

Friday, October 24, 2008

Algo sin nombre

(Cartas desempolvadas de mis archivos indecentes)

Estoy dejando pasar los vientos de este huracán.
Ahora mismo estoy temblando con dolores en el pecho.
Temblores de pensar que no te pueda encontrar,
dolores de saber que no te puedo buscar.
La gente que más me estima critica mi ingenuidad,
estos golpes de franqueza que me revelan toda,
de los pies a la cabeza.
Sin embargo, una vez más yo apuesto por la verdad,
quiero pensar que se puede entregar lo más sublime
sin que a uno lo condenen,
sin que a uno lo castiguen.
El que toma ventaja de las emociones del otro,
no es un tonto ni un hijo de puta,
es un pobre diablo.
Y no es que yo ande por ahí soltando mis confesiones a grito pelado,
o mejor, a puro grito.
Valoro mucho la estirpe de a quien le entrego mis cosas.
Mi lado inconsciente me desordena,
mi lado consciente no me funciona.
No puedo pensar, no sé lo que va a pasar,
las ideas tambalean, tropiezan unas con otras,
ruedan por la bañadera,
saltan en la cuerda floja,
no sé como llamar a este desborde,
al final el amor
es un algo sin nombre.
Por momentos cobro juicio y me comporto cautelosa,
más no puedo evitar regresar a este lugar,
enseguida recupero a la mujer que te añora,
a esta cosa temblorosa que se está muriendo a plazos,
que se le caen las palabras,
que se le caen los pedazos.
Si tuviera que elegir me quedo con la delirante,
dejo de ser la señora y me declaro vacante,
me declaro ingobernable, me declaro terrorista,
me declaro medio loca, me declaro invicta.
Haz conmigo lo que quieras
Si duermo no me despiertes,
no me cures esta pena, allá yo con mi condena,
ponme en tu lista de espera
que voy a esperar por ti,

voy a vivir cuatro vidas,
estoy borracha de ti.

Tuesday, October 7, 2008

De nuevo

Estoy sentada en una silla esperando una respuesta,
la respuesta a una pregunta que yo misma hice.
No sé qué fuerza me llevó a hacer la pregunta.
Miento lo sé, pero sonaria muy cursi decirlo.
Lo que sucede es que ahora estoy una vez más en una disyuntiva,
Cualquiera que sea la respuesta me va a dejar con la duda.
A veces repreguntar es una suerte de súplica,
y uno nunca termina quedándose tranquilo,
no sabrás si la persona ha reconsiderado su posición sinceramente
o si ha cambiado de parecer por clemencia.
De la respuesta a esa pregunta dependen muchas cosas,
mejor resumo esas cosas en una palabra, todo.
Mi vida podría dar un giro de 360 grados,
podría mudarme de casa, de país,
de trabajo, de idioma,
de condición, de color, de género.
Cuando me entrego, me lío tanto,
me mezclo, me adhiero, me confundo con el otro y
por supuesto, dejo de ser, en cierta medida, yo.
Tengo miedo, tendría que dejar de vivir con el hombre de mi vida,
nada más y nada menos.
Las cosas no iban a ser así, iban a pasar de otra manera,
yo iba a estar ahi hasta el infinito,
tú serias ése que estaria ahi junto a mi madre,
cuando yo despertara de un largo sueño.
El futuro es un signo de interrogación,
de momento no puedo hacer otra cosa
que seguirte regalándo cada uno de mis latidos,
nada más y nada menos,
pero también el mundo podria estar regalándome otra cosa,
la posibilidad de reencontrarme, de volver a ser yo misma,
de sentir a mi perro jugar con su huesito de silicona,
la posibilidad de empezar de nuevo,
nada más, y nada menos.

Sunday, September 7, 2008

Jaime Bayly

Por qué veo a Jaime Bayly?
Esta pregunta me la hizo mi esposo un dia cuando al regresar de viaje se dio cuenta que yo era una televidente habitual del programa de Jaime Bayly. El sabia la opinión que yo tenia de él. Cuando lo conocimos en Buenos Aires, y conste que no lo conozco personalmente, era un escritor inmaduro que utilizaba su bisexualidad como carta de presentación, esto fue un primer punto de desencuentro que me llevo a colocarlo, casi por precaución en una lista de locos sueltos a quien nunca podria tomar en serio, y debo aclarar que no precisamente porque fuera bisexual, sino porque no veo por qué hay que otorgarle a ese elemento un poder de cambio, por qué hay que convertir un detalle tan menor en el centro de un huracán.

He cambiado muchas veces de lugares y escenarios, dejé de tener noticias de él por bastante tiempo, dejé de seguir su carrera, hasta que casi diez años después me lo encuentro en Miami, de anfitrión de un programa de entrevistas llamado justamente "Bayly" en el que hace análisis personales de los dirigentes políticos latinoamericanos, de los presidentes y de cualquier hecho notorio o figura pública que despunte. El programa me gustaba, pero al principio me costaba definir si se trataba de un programa humorístico, político, o era un entramado con perfil psicológico que todavia no puedo caracterizar. Como la gran mayoría de las cosas me daban risa decidí que era un programa humorístico, y me quedé ahí. A quién no le gusta reírse casi a carcajadas a las diez de la noche, antes de irse a la cama? Y eso fue lo que le dije a mi esposo, lo veo porque me da risa. Y porque los años no pasan por gusto y ahora se ha convertido en un escritor maduro que con un poco más de mesura sigue haciendo gala de su bisexualidad ahora menguada pues lo que proclama a los cuatro vientos es su impotencia, no su abstinencia, y su condición de hombre a medias, y sigue saludando cada vez que puede a ese rebelde enervado que lleva dentro.

Es un tipo informado pero lo que hace en su programa es una descarga de obsesiones, y esto lo conduce a repetirse constantemente, y a hacer en muchos casos análisis ligeros. Sin embargo, lo protege el hecho de no ser un analista politico. Lo que en palabras de otro pudiera ser un error sustancial, una falta de rigor periodistico o una afirmación politicamente incorrecta, en él queda bien, es un escritor de ficción que dice lo que piensa y punto.


Lo que Jaime Bayly vende, es justamente su desparpajo, su ligereza al despeluzar reputaciones ajenas, al desbaratar la imagen de los protagonistas de la historia con esa libertad que lleva por dentro, que le permite no enarbolar banderas, con esa rebeldía convertida en audacia que ahora lo lleva a seguir transgrediendo sentado en una silla, con saco y corbata, disparando a quemarropas contra cualquiera que asome la cabecita, lo mismo puede ser Carla Bruni, que Barack Obama, que Ingrid Betancourt. Y lo que dice, lo dice de una manera no solo elocuente sino incluso, hasta creible. Pero esta credibilidad consiste solo en la certeza que uno tiene de que él cree firmemente en lo que está diciendo, más no en que lo que dice sea cierto. Son puntos de vista, no verdades robustas. Además fantasea, no deja de ser un escritor nunca. Esos impulsos creativos que le permiten decir que si él fuera presidente sería Presidente y Primera Dama al mismo tiempo le otorgan cierto grado de impunidad a sus palabras.

Me encanta Jaime Bayly, creo que el suyo es uno de los mejores programas de la television hispana en los Estados Unidos, Dios le dio un talento artisitico, al cual ha sabido sacarle le jugo, y a quien Dios se lo dio, San Pedro se lo bendiga. Aunque hace proselitismo incluso a veces diciendo cosas inverosímiles es un comunicador, no un lider de opinión, mientras se tenga eso claro no correremos peligro, si alguien lo quiere ver de otra manera que lo vea, pero él quedará libre de todo cargo y culpa.

Sunday, August 24, 2008

Robo de Identidad

Tengo una amiga famosa, no digo el nombre porque si lo digo no la van a reconocer, porque a decir verdad no es famosa, famoso es Luis Miguel, pero trabaja en television, y sale ahi todos los dias, hablando justamente de los famosos. El caso es que el otro día estaba muy preocupada porque había perdido su licencia de conducción, y aqui perder la licencia de conducción es peor que perder los dientes o la tarjeta de crédito, porque con ella alguien puede hacerse pasar por tí en cualquier lugar, y acceder a un tipo de vida que quiza tenga restringido porque no se ocupó de hacer las cosas bien en su momento o porque cayó, como cualquiera en una mala racha.

Con una licencia de otro puedes desfigurar el mal concepto que las oficinas del Buró de Crédito tienen de ti. Ya pasó la época de los hombres de palabra, esa en la que el tipo le decia al carnicero: dame la carne ahora para que mis hijos coman, yo te pago a fin de mes, y al carnicero le bastaba con saber que el hombre le habia hablado mirandolo a los ojos. De hecho trabajo en un lugar en que han archivado los files de los clientes que no han podido pagar, y cuando un cliente dice: “no se preocupe, yo le voy a pagar, le doy mi palabra,” mi jefe piensa por dentro: “Yo tengo una gaveta llena de hombres de palabra”. El caso es que ahora hay que tener crédito, el crédito es la palabra, y cuando te roban un documento con tus datos, el otro está usurpando un poco tu historial, tu identidad, tu palabra.

En la medida que el otro va gozando de tu historia, el verdadero dueño se va empobreciendo pues aunque denuncie el atraco, las oficinas del Credito hacen investigaciones y les tienes que probar que no compraste nada dando una primera cuota y luego te borraste de la faz de la tierra por arte de birlibirloque, o que no diste un cheque sin fondos, y para eso solo tienes tu palabra que para lo único que sirve en estos casos es para que ellos piensen que te quieres hacer el listo. De repente tu reputación anda por los suelos, como si siempre hubieras sido un pelele sin compromiso. El otro mientras tanto se hace dueño de tu nombre, de tu apellido, y de la dirección de tu domicilio, va adoptando tus posturas, asumiendo tus roles, destilando tus olores. A ti comienzan a llegarte las facturas con los gastos de ese otro, con tus sueños postergados pero con fecha de vencimiento, como tu reputación. Los papeles se superponen de modo tal que un dia podrias entrar a tu casa y verte sentado a la mesa comiendo con tu familia cuando aún no habias llegado.

A mi que me roben mi identidad. Yo soy capaz de tirar mi tajeta en cualquier esquina a ver si con ella usurpan mi existencia complicada, mis calambres, mi sangre coagulada, mis imsomnios, mis pesadillas, mi falta de tiempo, mis contratiempos, mis victorias grises y mis fugaces derrotas, mi compañera de trabajo, mi nombre, mi apellido y por qué no, mi reputación.

Sunday, August 17, 2008

Todo en su lugar

A veces uno cree que hay algo que hacer, que vivir se trata de ejecutar, de transformar las cosas, de combatir la rutina, de aventurarse a salir de los asuntos mundanos. Eso hasta que un martes cualquiera por la tardecita las cosas de tu vida se transforman y te das cuenta que no siempre es bueno que las cosas cambien. Las cosas deberian quedarse como están. Sobretodo si vives ese ejercicio de supervivencia, en el que pierdes la comunicación temporalmente con alguien muy importante de tu vida, y dejas de saber lo que está pasando en un lugar determinado y en un momento puntual, y dejas de recibir las señales que te indican que todo sigue igual, que esa rutina apacible o loca que siempre queremos romper, puede haberse roto pero no sabes exactamente de qué manera. Tu cabeza empieza a hilvanar historias, la incertidumbre se convierte en el mejor alimento para tus miedos, tu cerebro se estruja con un transcurrir de imágenes que sacude hasta tu sistema de creencias. Y tienes un teléfono en la mano, y un carro ahí afuera esperando por tí, y nueve mil millas de viaje submarino por delante. Y quedas como una servilleta sin saber como has podido sobrevivir a esos minutos en que casi has dejado de respirar, perdiendo un poco la vida, o un poco de vida, hasta que todo regresa a la normalidad. Entonces te das cuenta que esa calma, esa rutina, loca o apacible, ese saber que todo está en su lugar, es la felicidad., lo demás está de más, lo demás es lo de menos.

Saturday, August 2, 2008

Sin palabras

El otro dia escribi una carta con palabras audaces. Las palabras a veces son un asalto a mano armada, sobretodo si pretendes asaltar, irrumpir en el corazon de alguien, perforar hasta lo mas hondo de la conciencia de un hombre que se convirtió en el autor intelectual de tus fantasías. No se me ocurrio otra cosa para un artista, que otra cosa puedes hacer con alguien que trabaja con palabras que dejarlo sin palabras? Que otra cosa puedes hacer con un músico, poeta y loco?
Lo primero que hay que hacer es no poner los ojos en un artista. Nunca! Never! Pero si por alguna casualidad de esta azarosa vida los planetas se alinearon y no lo pudiste evitar, porque tu inconsciente te traiciona y tu consciente no te funciona, y encima no tienes 18 años, entonces cuelgue y llame al 911! Yo llamé al 911 pero no tenían opción para ese tipo de emergencias. Hice meditación, apliqué varias técnicas de relajación, invoqué a mis ancestros pero mis ancestros en estos casos suelen empujarme mucho más al desatino, y solo no intenté el suicidio porque no tengo los pantalones bien puestos, y porque no sabría qué hacer si después me arrepiento. Porque después de todo hay un después. En fín, que todos los caminos conducían a Roma. Escribi una carta y la coloqué en un sobre de manila de los medianos, de esos que parecen contener un resumé, una delaración de muerte o una declaración de guerra, hasta una declaración de principios, pero nunca una declaración de amor. Carta en mano me fui a donde siguiendo una lógica medio fallida podria encontrarme al destinatario, y con la ayuda de Dios y de todos los Santos lo encontré. El destinatario, en una de esas me miró, pero no me vio, hizo un pase de revista, como esos que hace uno a las revistas de cuatro con noventa y nueve en la cola del supermercado.

En el afán de entregarle la carta me puse a pensar de qué modo podría deslizarsela en el carro o dejársela caer en el mismisimo bolsillo de su pantalón. Mientras lo pensaba me miró otra vez, y me sonrió. Entonces pensé que seguramente me habia confundido con alguien. Estuve lenta de reflejos, pero decidí seguirlo hasta su casa, quiza podria echar la carta en su buzón. Cuando estaba ya en la esquina de mi casa pensé en la coincidencia de haber vivido tan cerca. El destinatario se bajó de su auto, abrió la puerta de mi casa, y se sentó en la silla de mi esposo que cuando pone un pie fuera de la casa se transforma, y visto con otros ojos es un perfecto desconocido que me deja sin palabras.

Monday, July 7, 2008

A quemarropas

Estas palabras se escriben a quemarropas, es una historia con muchas curvas, que nos demuestra que las cosas son tan feas como parecen, que la vida nos depara cosas inesperadas, que van más allá de todo control, que lo único que podemos controlar es aquello que tecleamos en el ordenador, y a veces ni eso.

Dos veces me he descubierto esta mañana mirando la pantalla de mi celular, esa barrita donde salen los números de teléfono que uno mira antes de responder para saber a qué atenerse. Dos veces en este día, y son las once y cuarto de la mañana. Y esas son solo las veces que me he percatado, vaya Ud. a saber cuantas veces la he mirado sin darme cuenta. La miro sin que suene, para ver si Dios, el destino, la fe, las leyes de Murphy o el Universo, me han jugado una mala pasada y la llamada que hace tanto tiempo espero haya entrado en algún momento sin darme cuenta y se muestre como llamada perdida. A veces el teléfono se da un golpe dentro de la cartera, con el monedero, con la agenda, con la cajita de pañitos desechables, con la peineta, con el pomo de agua, o con cualquier otro objeto imprescindible pero innnecesario que siempre llevo conmigo, y se pone en modo silente, a veces he estado parada debajo de una nube que no me ha dejado ver el satélite en un dia nublado, y de repente, una sucesión de hechos inconexos y asimétricos se han confabulado y no han permitido que entre una llamada. Y no ha entrado la llamada. Pero esta vez no puedo darme el lujo de perderla. Si pierdo esta llamada estaría perdiendo el alivio que necesito para retomar el sueño, para aliviar mis dolores de estómago, la luz y la paz que necesitan mis dias. Si entra esta llamada, trataré de parar la vida por un instante, de sentarme en el piso y, de meterme en un hueco y hablar, por fin hablarte, con el último suspiro que me quede, con el último aliento, con mis gotas de sudor y con mi sangre y con mis dientes, si para ese entonces me queda alguno, trataré de decirte en cinco minutos, después de tantos malabares, después de tantas lunas y de tantas golondrinas, después de tanta espera, y de tantas idioteces, que te quiero.

Monday, June 23, 2008

Buenos Aires

Buenos Aires supo ser una gran ciudad y se quedó con la costumbre, y nos dejó a todos, incluso a los que llegamos tarde con ese sabor de los cafés más elegantes, de los olores más sublimes en los momentos más tempranos.

Buenos Aires tiene un pedigree inalterable, ella camina inconsciente y sale invicta, solvente, ausente de los enojos y de los antojos, al margen de las contiendas, porque todo es corregible, transitorio, fluctuante, todo comienza en Buenos Aires.

Buenos Aires es una coartada perfecta, un crimen organizado, un divorcio, una rabieta, un secuestro voluntario. Y pensándolo bien, aún cuando se trata de su historia, Buenos Aires tiene tambien aires nuevos e inesperados, un dia nos levantamos con las vacas gordas y el otro con el dinero secuestrado. Entonces nos quedamos sin argumentos y ahí comprendemos que Buenos Aires no es un tango, es un bolero, no es una ola, es su espuma, es un segundo comienzo, es una segunda luna.

Sunday, June 8, 2008

Los cuarenta

Siempre escuché que los cuarenta años se celebran de una manera distinta. La gente que incluso no celebra normalmente su cumpleanos celebra los cuarenta con entusiasmo. Yo estoy en mi año número cuarenta y por fin entiendo la magnitud del acontecimiento. Lo que marca la diferencia entre lo que eramos antes de los cuarenta y lo que somos despues, es que antes pensábamos en todo lo que nos rodeaba como un ente superior al cual debíamos adaptarnos, pensábamos que debíamos dar, que debíamos hacer cosas para que esos entes superiores nos aceptaran.

Estoy viviendo cada día de este año como un descubrimiento, he cometido la osadía de saber lo que quiero y lo que no quiero, he vivido lo suficiente como para atreverme a poner completamente en orden mis prioridades, y cuando uno hace eso se convierte en una persona imperturbable capaz de descartar todo aquello que le molesta. Creo que he dado bastante, que es hora de recibir, no creo que tenga que hacer nada para adaptarme. Me he asumido totalmente como ese objeto preciado que soy, una persona maravillosa que ha alcanzado la estatura de la vida y eso me convierte tambien en una persona peligrosa, encierro en mi el peligro potencial de haber aprendido a decir que No.

Debi haberlo aprendido antes. Probablemente alguna gente que me lee pensara que para decir que no no hay que cumplir cuarenta anos. Pues bien, vean que clase de tarada he sido que recien ahora es que estoy aprendiendo a quedar bien conmigo misma en primer lugar, algo para lo cual hay que tener mucho carácter.

Y no es que tenga todos los capitulos cerrados, de hecho se han abierto temas en mi vida que me obligan a empezar de nuevo. Tampoco es que no tenga mas dudas, las dudas son ejercicios mentales que nos obligan a tener algo que celebrar cuando cumplimos cuarenta años. La duda cambia y se multiplica. Cuantas veces hemos estado ante el telefono, con la duda de hacer o no hacer esa llamada. Antes no la hacíamos por orgullo pueril, ahora tenemos la madurez de hacerla porque sabemos que tambien es bueno tomar la iniciativa o mostrarse fresca y libre de rencores despues de un momento de tensión. Sin embargo, no la hago, no la haré porque uno aprende tambien a dejar enfriar las cosas, a no seguir el primer impulso, a dejar que el tiempo diga lo que el otro no quiere decir.

El tiempo es magico, y no pasa por gusto, el tiempo suele hacer algunas de estas dos cosas con su huella implacable: o lo cura todo, y no precisamente de un plumazo; o te ayuda a perder de una manera virtuosa, que para todo, absolutamente para todo en esta vida, hay que tener clase.

Sunday, May 18, 2008

De setos y de carteras...

Tengo momentos, épocas en que miro hacia abajo, me siento en el patio y miro las hormigas caminar en fila, busco el final de esos senderos, hasta que llego al hueco donde se meten por dentro de la pared, donde ya no puedo ver más, y a veces me entretengo aún en imaginar lo que podria suceder más allá. Tengo momentos en que late más fuerte esa parte piadosa de mí y salgo con mi perro solo para que no se quede solo en la casa, o le dejo el aire acondicionado puesto en días de mucho calor, o salvo al sapo del patio en vez de matarlo con puñados de sal. Los sábados, cuando estoy sola, cojo mi tijera de podar y me voy al frente, tiene que ser bien temprano, y me pongo a emparejar los setos y a desyerbar, pañuelo en mano y gorra en cabeza tomando agua, hasta que el sol seca el suelo o me canso, y me voy adentro plena, con las uñas negras, pero con la gratitud que solo producen las cosas simples, las cosas eternas, como el olor de la tierra.

Tengo momentos en que miro hacia arriba, esos momentos son malos porque nunca que he mirado hacia arriba he visto nada y mira que he buscado.Tengo otros momentos en que estoy en la parte de la escalera que no tiene pasamanos, pero salgo por ahí con la mirada erguida porque dicen que a mal tiempo buena cara.

Tengo momentos en que me lleno de burbujas y salgo a la calle a comprarme una cartera y dibujo un jolongo, una cosa rústica, clara, neutra, de verano, algo fresco que se me antoja perfecto y necesario. Y asi empiezo a deambular por las tiendas hasta que lo encuentro. Lo encuentro a doscientos sesenta y nueve dólares con noventa y nueve centavos, y me digo: no puede ser Niurka, quién diablos te has creído tú que eres para comprarte una cartera de doscientos sesenta y nueve dólares con noventa y nueve centavos? Busco un espejo, me la engancho, me la pongo en el hombro y camino con ella por toda la tienda, en lo que pienso qué hacer, qué hacer con el sentimiento de culpa, no con la cartera, con ella se qué hacer, comprarla y llevármela para mi casa.

Mientras tanto ando con ella tranquila, no vaya a ser que en lo que lo pienso venga una desgraciada y se la lleve así no más, sin pensarlo, que esa clase de gente anda por dondequiera. Con la cartera en el hombro me voy a otros departamentos, me dedico a mirar otras cosas para engañar el sentido, y doy vueltas en círculos hasta que regreso nuevamente a donde estaba, me lleno de valor y la pongo en su sitio. En otro acto de heroísmo salgo de la tienda sin mirar atrás, la dejo ahí, sola, en manos de la desgraciada, que seguramente esta allá adentro ya dirigiendo sus pasos hacia ella.
Monto en el auto, arranco, me voy, llego a mi casa, trato de entretener el sentido y dejo pasar las horas, me acuesto, ... me duermo y me levanto al otro dia, alucinando pretextos. Me digo: si estoy sola, lejos de todos, no le hago mal a nadie, trabajo y me gano mis quilitos, no fumo, no bebo, no tengo hijos, GGGGUUUAAA!!!!, y encima los sábados trabajo la tierra, que viene siendo algo así como ir a la Iglesia; qué menos puedo hacer que comprarme una cartera?

Wednesday, April 23, 2008

Añicos

Dana dijo: El Lunes empieza haciéndole honor a su nombre: complicado. Debe ser tan complicado el lunes que a veces su energía se pasa para el martes y terminas igual preguntandote, por qué hoy no me quedé en casa? Por que tengo un jefe, claro. Pero hoy, con jefe y todo el tráfico no me dejó llegar al trabajo hasta después de las diez de la mañana y son las doce de la noche y no me he bañado, y eso es grave porque bañarme para mí es la única forma de empezar a descansar, es un preludio, pero estoy tan cansada que no oigo. Entonces elegí entre bañarme y escribir para que sepan que sigo aqui, consciente de que a la vida no hay que meterle tanta cabeza y de que debo trabajar más cerca y dejar de parquear en un alley para no escrachar más el farol del auto contra el poste de luz y hacerlo añicos, para no llegar más aqui a las mil y quinientas, pero sobre todo, para que la elección no sea entre bañarme y escribir sino entre escribir esto y escribir otra cosa, como por ejemplo, algo que valga la pena…

Wednesday, March 26, 2008

Descubrirnos

Todos los dias aprendo algo, de la vida digo. Casi todo está dicho en los libros y de lo que no está dicho no me preocupo porque ni viviendo tres veces podria yo abarcar lo que ya alguien se tomó el trabajo de descubrir y poner en blanco y negro. Pero no es lo mismo aprender por observación que leer o estudiar un tema de la manera tradicional. Lo que se aprende por observación es enriquecedor y ejemplarizante, surte el mismo efecto que lo que se aprende a palos. Cada nueva experiencia que vivimos nos pone a prueba, nos trae sensaciones nuevas, pero la mejor sensación que nos trae cada nueva experiencia es la posibilidad de aprender de nosotros mismos. Uno nunca sabe todas las posibilidades que encierra y es maravilloso descubrir que tenemos capacidades que desconociamos o que podemos reactivar talentos que dormitaban. No soy amiga de la inercia, no resisto hacer las cosas mecánicamente, aunque reconozco que hacer algunas cosas mecánicamente tiene sus ventajas. Aborrezco todo lo que me anule la creatividad, pero confieso que a pesar de los esfuerzos que hago para que no me salgan telarañas en el cerebro he tenido etapas de un verdadero celibato intelectual. Por eso estoy contenta, trabajar me pone a otro ritmo, y confieso que no soy una persona trabajadora. Suena mal? Lo sé, pero qué quieres que te diga. De trabajar lo que me gusta es el ritmo, levantarme, bañarme y salir de casa con la sensación de que le estoy ganando tiempo al tiempo con toda mi calma, me gusta la sensación de estar levantada cuando todos duermen, cuando aún no se escuchan los primeros ruidos del día, cuando los perros se vuelven cómplices y no ladran, cuando todo se confabula para no romper esa bruma única de la mañana. Me gusta salir a la carretera y andar con las ventanillas bajas, escuchar cualquier música de mis discos, cantar como Norah Jones, o como mi vecina Vania, me gusta entonces llegar y sumergirme en la locura azul de una oficina que no para, y por momentos pensar que me vuelvo loca, pero al final decirle a mi jefe: comprendes? Estoy segura que ya se me va a pasar porque lo que me gusta de trabajar no tiene nada que ver con trabajar, no soy trabajadora, ni madrugadora, ni abnegada, pero por ahora todo marcha bien, y lo mejor es que no pienso en aquello que ustedes saben,…, que no voy a decir lo que es porque no puedo hablar de eso ahora.

Saturday, March 22, 2008

Volver a casa...

Cuando venía hoy hacia la casa, corriendo en realidad, por haber dejado tanto rato a FITO solo, mi perro, pensaba que entendia claramente lo que Alejandro Sanz quiso decir cuando dijo: “…cuando nadie me ve suelo ser o no ser, cuando nadie me ve no me limita la piel…”A mi tampoco me limita la piel cuando nadie me ve. Sobre todo ahora que empecé a trabajar y tengo el ego en su punto, ahora que se abren otras puertas, que se destraban algunos temas, ahora que veo que quedan restos del pasamanos de la escalera de aquel edificio en ruinas. Hoy hablé horas con mi madre, grité en medio de la nada, de la nada cotidiana, dormí con una tajada de aire limpio entrando por el filo de una ventana. No sé si fue el dejar entreabierta la ventana lo que incidió en que se abrieran las puertas, lo cierto es que a la vez que me despido de ciertos anhelos por una cuestión práctica, me llegan las ediciones impresas de otros sueños postergados.

Algunos me felicitan porque tengo un puesto relativamente cómodo y bien pagado, que es lo a lo que aspiramos todos, bah! no sé, algunos querrán mandar y tener gente a cargo para no disparar un chícharo y ganar muchísima plata, yo quiero ser soldado raso y que cada cual haga lo que quiera con su vida y con su trabajo. He salido de casa a las siete de la mañana y he regresado a las ocho de la noche mareada de no almorzar, y al no tener marido en casa (que por cierto, no me ha dejado porque parece que me quiere mucho), lo he hecho pensando solo en mi perro y en la supervivencia de mi espalda.

En Cuba hay un dicho que reza: Somos libres, y ahora qué? Que me evoca esos momentos de la vida en que uno alcanza algo que ha venido deseando mucho y cuando lo tiene en las manos, oscila entre el desconcierto y el entusiasmo. Pero los grandes momentos de la vida tienen eso, son imperceptibles. Me siento como a las doce de la noche de un 31 de Diciembre, en que a pesar de la euforia y los gritos de la gente, yo no acabo de darme cuenta de lo que pasa y lo único que quiero es irme a dormir a casa. En este caso me doy cuenta, estaba detenida, viviendo una vida prestada, llegué a perder la voz en el medio de la palabra, y tenia el deber de encontrarla, estoy generando progreso, y eso es fuerte, así que mejor me voy a la cama, me tapo con colcha, apago la luz, y espero la calma.

Monday, March 3, 2008

La Otra Mitad II

Quizá la escritura sea ese precipicio que necesito ahora, que me permite pararme al borde de él, inclinar la cabeza, mirar hacia abajo y sentir la adrenalina que me corre por las venas, luchar para no caerme, encontrar el equilibrio, y después seguir caminando como si tal cosa, como si fuera yo una persona normal. Aquí amerita decir que si yo fuera una persona normal sabría si la que está escribiendo estas líneas soy yo o si es esa otra dimensión en que vive mi otro yo, -que por momentos es más auténtico-, y entonces podría definir si estas historias de convivencia han estado en mi vida, en mi memoria o en mi imaginación.

Estos tiempos son peligrosos, y el mayor peligro estriba en el afán de aprovechar el tiempo, pero de aprovecharlo por omisión, porque todo lo que se hace sin querer sabe a tiempo perdido. La única manera de no perder el tiempo no es haciendo más cosas todavía, no hay que tratar de consumir las horas, de apretujarlas para que quepan en ellas todo lo que nos alcance, -probablemente para tener que hacer menos cosas manana-. La única manera de no perder el tiempo es dejar atrás todo lo que nos pesa. Yo estoy completamente segura de que soy feliz, soy consciente de que la felicidad es la suma de pequeños momentos, la felicidad es levantarse por la mañana y tener a quién preguntarle la hora; no es un estado de exitación o de exaltación, es una música apacible que transcurre entre las horas. Pero hay veces que esa música se torna en ruido de fondo y es ahí cuando comprendes que la vida se va en el bostezo que das cuando alcanzas la perfección, cuando dejas de ser una mujer que se sienta en el piso.

La vida sería muy aburrida si transitáramos por ella con las luces encendidas y pudiéramos ver con claridad cada paso que damos, -y convengamos en que cualquier paso se puede convertir lo mismo en una puerta que se abre hacia un terreno firme que en un salto al vacío-. A mí me gusta la vida porque me plantea retos que llegan sin salir a buscarlos, por esas bifurcaciones que se presentan de a ratos, y que por suerte sólo se presentan de a ratos. Y ahí una tiene otro reto, otra disyuntiva, la de cambiar el panorama o hacerse de la vista gorda. Yo por ejemplo sé que me voy a quedar sola, que no voy a tener hijos, que mi marido me va a dejar, y que de pronto me encontraré divagando en medio de escombros, de los restos de un edificio derrumbado, subiendo por una escalera que ha perdido el pasamanos. Y es que aunque tengo la opción de hacerme la loca y seguir subiendo esa escalera infinita sin enterarme de nada, he decidido mirar hacia los lados
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Tuesday, February 26, 2008

La Otra Mitad

Nunca pensé que tener 39 años significaría tantas cosas, no sé si lo que me pasa le suceda a alguna otra precuarentona, pero más de una tiene que estar sintiendo lo mismo. Antes de los 39 yo era sólo una mujer signada por sus problemas de infertilidad. Quizá el término sólo esté demás aquí, porque ser una mujer infértil es una epopeya, que nunca puede ir precedida de un sólo. Lo que sucede es que tener un problema de infertilidad antes de los 39 es una batalla, después de los 39 es el ocaso de una guerra de desgaste que ya solo se cuestiona si colocar un punto final o un punto y aparte.

Yo llevo mucho tiempo lidiando con ese tema y puedo decirles que he aprendido a compartimentar mi angustia, que por momentos he logrado ser sólo una mujer de 39 años, sin ningún adjetivo detrás. Cuando estoy en ese plano me doy cuenta de las otras cosas que significa tener 39 años. Las señales me llegan por distintas vías y de formas muy sutiles. Dejemos de echarle la culpa al chico al que se le escapa la pelota y te grita “Señora, me alcanza el balón?” Lo que me avisa que estoy en esa etapa de temprana senectud es el deseo irrefrenable de querer empezar de nuevo, es un espiritu temerario que se apodera de mi, que me invita a hacer todo lo que quiero hacer, todo lo que aún no he hecho y que es imprescindible para seguir viviendo la vida en paz.

No se trata de aventurarme a hacer viajes exóticos o cosas estrafalarias, no se trata de cumplir los sueños postergados. Hablo de un espíritu temerario, no aventurero, el aventurero ya pasó cuando tenía 20 años, en aquellos tiempos en que el mundo estaba a mis pies, y solia ser yo algo más que una cara bonita. Solía reír a carcajadas y decir cosas interesantes, solía ir a trabajar en bicicleta disponiendo y decidiendo sobre cuanta cosa se me ponía por delante, eran tiempos en que no tenía que preguntarle nada a nadie, porque tenía todas las respuestas, y si no las inventaba. Cuando tenía mi cuarto lleno de frases que escribía en la pared porque me daba la gana, porque creía que la vida era una frase, que todo lo que uno podia querer saber, decir o necesitar, estaba escrito en alguna parte y yo debía solamente acumular esa sabiduría que había dejado de caber en mis cuadernos y que empezó a acapararlo todo, cuando tenía un novio que me cantaba canciones por teléfono de madrugada mientras las componía. Eran tiempos de abrazos y de apretones, pero sobre todo de palabras, tiempos esos en los que una habla y el mundo escucha como una profesía, tiempos en que te pones una camisa y una corbata y te tomas un trago, y te fumas un habano y escribes una carta, tiempos en que la luna se confabulaba con el mar, para que brillara la sal de tu piel y entonces te dieras cuenta de que estabas hecha de espuma, de una espuma que al final nadie podía atrapar, porque una estaba ahí pero era inalcanzable. Todos, en la medida de las posibilidades hicimos lo más arriesgado que pudimos sin pedirle permiso a nadie, unos se fueron a Europa con una mochila al hombro, otros nos fuimos a la playa a hacer el amor entre las uvas caletas. Yo hablo ahora de temeridad, de un tipo de riesgo más grave, de cuando te das cuenta que ya has vivido la mitad de tu vida, y tienes que decidir qué vas a hacer con la otra mitad.

Continuará...



Sunday, February 24, 2008

Solo Dios sabe...

Contrariamente a lo que pronostiqué la semana pasada, la Asamblea Nacional de Poder Popular de Cuba, eligió hoy por unanimidad (con el voto de los 614 diputados que integran la Asamblea), a Raúl Castro como nuevo Presidente de Cuba. Lo que acaba de ocurrir era la mas probable de las posibilidades pero mi excesivo entusiasmo me llevó a considerar la posibilidad de que el momento fuera aprovechado para presentar a una figura de otro calibre, para imprimirle un nuevo matiz a la nueva etapa.

Insisto en que hubiera sido muy conveniente colocar a una figura que proyectara una imagen más fresca, alguien que hubiera jugado un rol menos protagónico y hubiera estado en funciones de carácter civil, económico, o social. La ventaja de hacer esto radicaba en la necesidad de emitir un mensaje de cambio y renovación y de proyectar señales que fueran más aceptables internacionalmente.

Sin embargo, nada de cambios, las figuras son las de siempre lo que nos habla de una postura que se reitera y que no da su brazo a torcer. No obstante los cambios vienen, ya están en práctica algunas cosas puntuales que tienen que ver con las normas mas intolerables que caortaban la libertad del que quiere salir de la Isla, pero no habrán cambios sustanciales, tanto Raúl como cualquier otro solo han de hacer eso, débiles reformas que no desviarán al país del camino del Socialismo, y no sé si eso esté tan mal. Como dije anteriormente, el cubano necesita dejar de ser ciudadano de segunda, dejar de vivir pidiendo permiso y dando explicaciones, y a mí que me critiquen pero los cambios en Cuba no se pueden hacer abruptamente, ahí está la antigua Unión Soviética para demostrarlo. Quizá lo que pretenden es hacer una serie de reformas que dignifiquen un poco al cubano de a pie, sin transigir demasiado en las cosas esenciales, no sé, todo se deriva del discurso de Raúl Castro que vagamente perfila por donde viene la cosa, solo Dios sabe...

Tuesday, February 19, 2008

Crónica de un Adiós

Nos hemos levantado hoy con la noticia de la renuncia de Fidel Castro después de largos meses de tratamientos y recuperación de una delicada cirugía intestinal. La noticia pudo haberme agrarrado en cualquier parte. Con tantos cambios de ciudades que he operado en los últimos meses, podria haber estado yo en Buenos Aires, en San Diego, California, o en La Habana, pero me agarró en Miami donde se ha recibido con escepticismo aunque se observan dos vertientes básicas en el análisis y las reacciones de los exiliados. Hay un grupo de exiliados que siguen queriendo ver sangre, que no confían en que este anuncio esboce un cambio y que cualquier sucesión sería solo una sucesión de utilería o un cambio de maquillaje, mientras que para otros, generalmente más jóvenes es un día histórico que definitivamente marca el comienzo de una nueva era.

En este momento solo podemos esbozar valoraciones personales porque como ya dije aquí, en el terreno de la politica no tenemos verdades robustas y cualquier aproximación no solamente es subjetiva sino que está viciada. Yo particularmente lo tomo como un acto inteligente, como una decisión sincera, que debió haberle costado mucho al mandatario, pero que al final se ha impuesto la cordura, un poco tardía eso sí, de reconocer sus limitaciones y de no enfrascarse en seguir delineando los destinos de un país cuando no está en buenas condiciones físicas ni en la total plenitud de sus facultades.

Para algunos no le queda mas remedio, pero sabiendo como sabemos que si el hombre se enfrasca en morir con las botas puestas lo hace, es muy relevante y digna la decisión. Se ha operado una suerte de retiro voluntario que lo magnifica, porque de cierta manera el hombre está poniendo los intereses de la nación por encima de los suyos, y esto lo deja muy bien parado. Lo deja muy bien parado porque todo el mundo sabe que, gústele a quien le guste y pésele a quien le pese, la obnubilación que anida en los corazones de los miembros del parlamento cubano por la figura de Fidel Castro, hubiera hecho que el domingo ratificaran al Comandante como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, si éste no hubiera renunciado. Es cierto que debió haberlo hecho antes, pero nunca es tarde para darle paso a los demás, la decisión es magna, y yo le creo.

Esto de creerle o no creerle no depende de otra cosa que no sea de nuestro nivel de ingenuidad o perspicacia y todo el mundo quiere estar del lado de los perspicaces, pero yo le creo. El hombre se retira y bien sé que no se irá a dormir la siesta, y bien sé que no se operarán cambios rotundos desde el punto de vista político, que no habrán cambios sustanciales en el sistema electoral cubano, y que el poder seguirá en manos de alguien de la presente cúpula, pero también sé que significará un desbloqueo interno que de hecho ya ha comenzado, con medidas que ya están fraguadas y que serán de gran impacto en la vida cotidiana de los cubanos de la isla, porque si ciertamente para que realmente pasemos a ser una sociedad civilizada Cuba debe avanzar hacia fórmulas más democráticas, a posturas más aceptables internacionalmente, lo que realmente Cuba necesita es una desregulación que permita que los cubanos dejen de ser ciudadanos de segunda.

El próximo domingo habrá sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular que es el órgano parlamentario de la Isla, que dentro de sus funciones tiene la de elegir al Presidente del Consejo de Estado y de Ministros, cargo que ha venido desempeñando Fidel desde hace 49 años. El próximo domingo también será un día histórico pues se dibujará un nuevo gabinete, con un nuevo Presidente que de por sí ya forma parte del Buró Político, o sea que nada de nuevos esquemas o de renovados panoramas, pero no perder de vista que dentro de la vieja escuela hay gente con ideas propias que quiere detener el estancamiento y darle un nuevo impulso a la deteriorada situación interna.

Y me atrevo a avisorar una cosa, quizá el domingo tenga que volver sobre mis palabras, pero no creo que el Parlamento elija a Raúl Castro como nuevo presidente, en primer lugar porque el pueblo cubano es fidelista y no raulista, y en segundo lugar porque dentro de la misma gama de dirigentes hay nombres que no están relacionados con la coalición militar de la isla, sino que han estado al frente de organismos civiles o en funciones de carácter cientifico o social, y sería un gran error designar a alguien que es visto internacionalmente como un miembro del mismo clan, como más de lo mismo, pero sin el carisma y la inteligencia de Fidel Castro, por tanto, bienvenido el cambio por pequeño que sea y Gracias, Fidel.

Friday, February 15, 2008

La Suma de los dias...


En vistas de que hace mucho que no escribo quiero reportarme, he sentido el calor de esta familia y es justo que comparta con ustedes algunas cosas. Mi alma está llena de llagas, de dolores viejos y nuevos que compiten para ver cual me endurece más y cual me hace más daño, no obstante, en las almas nobles hay siempre también un canto de cuna que me ha hecho sentir unos brazos eternos que me arrullan y me abrazan.

Y no es que no haya escrito nada, sobre todo en estas épocas uno escribe para descargar ciertos deseos irrefrenables de hacer cosas inconfesables. Hace mucho le escuché a Fernando Peña decir que si él no fuera actor sería un asesino serial, y ciertamente yo he escrito en estos días para no matar a nadie. También he tenido que meter la cabeza debajo de la almohada para esquivar ciertas verdades que me han rebotado en la cara, pero por suerte tengo otras cosas que me alejan de ese lado avinagrado y poco amable de mi existencia, estoy estudiando para un examen de oposición y preparando otra mudanza, esta vez a Buenos Aires.

Esto es todo, mas allá de los temas pendientes que he ido metiendo en un cajón y que se acumulan como libros de verano, pero todo pasa. El mejor homenaje que les podemos hacer a aquellos que nos quisieron tanto es tratar de ser felices y eso se logra tomándonos un poco menos en serio las cosas y sacando cuenta de lo que tenemos y no de lo que nos falta “para que fluyan mejor los días, pues eso no más es vivir, dejar atrás cada día y cada noche que como las aguas del río de Heráclito nunca más volverán”, palabras de una amiga-hermana escritora.

En otro orden de cosas he recibido dos premios, uno otorgado por
Alma, el otro por Dana, los premios son: el premio Skynet, y el premio Arte y Pico. Muchas gracias a las dos pues soy una asidua visitante de sus blogs, y tanto las dulces reflexiones de Dana en este amargo camino, como los sustanciosos articulos de Alma me gustan y me enriquecen. Gracias! Según el premio de Alma debo proponer siete blogs interesantes y según el de Dana cinco, voy por siete:

Propongo ante todo el blog de
Dana, por esa forma tan dulce de llevarnos de la mano en este amargo camino. Una chica muy inteligente y esmerada.

Propongo el blog de
Alma, por sus interesantes artículos,

Propongo el blog de
Almir, una amiga catalana que acaba de pasar por una pérdida irreparable pero tiene muchas razones para levantarse,

Propongo el blog de
José Carlos, un chico español que tiene unas riquísimas recetas de cocina, es un blog constante que denota mucho esmero y dedicación, pasión por lo que hace,

Propongo el blog de
Lalodelce, una chica chilena que vive en Oregón y que escribe muy bien en su blog que data del 2004,

Propongo a
Orsai, es para mi el mejor,

Propongo el blog de
Cala, que me alentó en esto de abrir este blog, alquien que de vez en cuando se nos desaparece pero sentimos su alma bohemia revolotear por todos lados con una taza de café.

Pudiera haber colocado otros pero hay que respetar las reglas, garcias a todos y seguimos en carrera!

Sunday, January 13, 2008

Hoy

Estoy escribiendo estas palabras un dia triste, un dia en que han pasado cosas muy malas, estoy escribiendo un día sin esperanzas. Hace varias horas que me dieron la noticia y no me ha salido una lágrima, será que estoy muy entrenada en esto de las malas noticias, o que lo esperaba. Hoy cuando me levanté supe que había pasado algo en La Habana, no obstante seguí mi día, puse gasolina, fui a la librería, compré dos buenos libros y regresé a mi casa y ya sentada en
la mesa de la cocina leí el mensaje de mi madre con asunto: “lo inevitable…,” y ya más adentro: “......estoy tranquila”, y supe que todo habia terminado, y supe sobre todo del esfuerzo que hace ella para que yo siga mis proyectos y mi vida, y no me vuelva loca, y no me desarme. Y ahí quedaron el pomo de medicinas y el encendedor, y el humo del cigarro, y la cama fowler, y el cariño de mi madre.

Para colmo alguien salió a matar pájaros anoche sin avisarme, el teléfono no suena, no tengo esperanzas, me siento un pedazo de nada flotando entre las balas, (siempre es mejor ser un blanco). Autoestima? Uno de los libros que compré es para trabajar cuando tienes la autoestima dos puntos por debajo de
la de Kafka.

Pero escribo esta carta hoy, esta carta que saldrá sin sensación térmica, ni dérmica, ni auditiva, sin los pedazos de carne que caen sobre la página, sin
el retumbar de una voz apagada y errante. Lo único que puedo hacer hoy con cordura es escribir, comerme las uñas y escribir, por eso seguiré escribiendo y seguiré escribiendo en grande, porque escribir es un acto de resurrección, y yo estoy en un hueco tan profundo que si sobrevivo se va a oir hablar de mí,
si salgo de esta la gente va a querer saber quien soy. Y no quiero contar esto mañana, quiero contarlo hoy, hoy que no tengo nombre ni apellido, ni una carta de presentación, ni un cuño de nada ni una sonrisa, ni una esperanza, hoy que no soy nadie.

Wednesday, January 2, 2008

FELIZ AÑO NUEVO!!!



Quiero felicitar con mucho entusiasmo a este ínfimo grupete de amigos que me visitan con regularidad y dejan sus comentarios tan oportunos y atinados en mi blog, que me acompañan en mis conciertos y desconciertos, y que refuerzan los pilares de una escritora tardía que sin saberlo están ayudando a construir. Gracias Cala, Dana, Almir, Naty, Mónica y Mateo Deyanira, Jose Carlos, Co! Alazul, Mi negri. Alma, Hercules Gomez, Lalodelce, Florencia, Natiz, Nikolina, Soledad, F. Fabián, Miriam, Paola, Ahoravaaserquesi, Sara y Vampirella. También agradezco a los silenciosos, me llegan sus energías, anímense tontillos, lo que no mata fortalece. Un abrazo a todos, nos seguiremos visitando. Este grupo podría ser infinito, ojalá crezca este año, pero me gusta pensar que siempre van a estar ahí ustedes, los que más me conocen, ustedes son mi suerte y mi amparo.