Tuesday, June 5, 2007

Penosa confesion

OK, lo confieso, veo televisión. Y no estoy hablando del Discovery Channel o del National Geographic, veo programas de chimentos. Ya sé que no es propio de personas interesantes, inteligentes o intelectuales. Será que no soy interesante, inteligente y mucho menos intelectual, pero VEO television. Me postro atónita ante este idiotizante aparato y veo todo lo que pasan, desde el mas inofensivo animado para niños hasta todos esos programas morbosos y amarillistas, incluyendo los reality shows mas baratos y las novelas de silicona, así como ese circo mediatico de famosetes que venden hasta su alma al diablo por diez minutos de gloria.

Y lo peor es que no me siento mal por ello. Creo que con la misma capacidad de discernimiento que puedo leerme un libro de Tomas Eloy Martinez y un poema de Juarróz, puedo ver esos programas de silicona que le dan carácter de información de interés nacional al chisme y a las coyundas. O sea que conozco a Susana Gimenez, a Luciana Zalazar y a Jacobo Winograd, y no hay, todo el que me conoce lo sabe, que no hay absolutamente nadie que pueda despegarme del televisor a la hora de Tinelly. Seré tarada?

1 comment:

Anonymous said...

i'm guilty! yo miro intrusos cada vez que puedo y (la verdad) me divierte.
Después de ver a todos esos tarados, mi vida parece un cuento de hadas, hasta me siento re-normal.
es una lucha :P:P
suerte!